domingo, 30 de diciembre de 2007

Otra muerte en el futbol


Phil O’Donnell, capitán del Motherwell de Escocia, murió ayer durante el encuentro ante el Dundee United tras sufrir un desmayo en el momento de ser reemplazado.

El jugador, de 35 años, se desplomó cuando iba a ser sustituido por Marc Fitzpatrick, a pocos minutos de finalizar el partido que ganaba su equipo por 5-3 por la liga escocesa de futbol.

O’Donnell fue tratado durante unos cinco minutos en el campo de juego antes de ser trasladado en una ambulancia al hospital.

Las asistencias del estadio le llevaron en camilla al vestuario, de donde fue trasladado a un hospital cercano de la localidad escocesa. Sin embargo, momentos después de llegar al centro sanitario, el presidente de la entidad Bill Dickie anunciaba el fallecimiento del jugador y capitán de la escuadra.

“No sabemos qué es lo que ha sido. Pero habrá una autopsia. Ha sido un trágico accidente. Es todo lo que puedo decir”, indicó el presidente del Motherwell, sexto de la Liga de Escocia.

O’Donnell, que había iniciado su carrera futbolística en el propio Motherwell antes de su paso por el Celtic y el Sheffield inglés, estaba a punto de ser sustituido por Fitzpatrick, pero se derrumbó antes de que pudiera abandonar el terreno de juego por su propio pie.

El futbolista fue atendido en el césped durante cinco minutos y después fue llevado rápidamente al vestuario.

David Clarkson, sobrino de O’Donnell y autor de dos de los goles de su equipo en el duelo contra el Dundee, se vio muy afectado por la situación y minutos después tuvo que ser reemplazado.

“No quiero decir nada más que esto es una tragedia para el club. Y la manera en la que ahora queda su esposa y sus hijos pequeños”, añadió el técnico del Motherwell Mark McGhee.

“Eso es lo que todos estamos sintiendo esta noche. No importa nada más”, añadió.

El timonel explicó que el reemplazo del capitán fue una “coincidencia absoluta” y no porque se sintiera mal. “Sólo pensamos en resguardarlo un poco para el miércoles”, señaló.

Entretanto, el presidente de la Asociación Escocesa de Futbol, Gordon Smith, se manifestó sumamente conmovido por la muerte del jugador. “Es una noticia devastadora”, dijo.

“Phil no sólo era un jugador excepcional sino también un gran ser humano”, señaló. “Mis pensamientos están con la familia en este momento tan trágico”, agregó Smith.

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